Bragas vibradoras
Categoría: Productos del Sex Shop
Etiquetas: Lenceria Tangas Culottes Braguitas, vibradores mando a distancia
Al igual que en el mundo de la moda, en el mundo del entretenimiento para adultos con productos eróticos, también existen los «must have», es decir, los juguetes sexuales que toda persona, mujer u hombre, debemos tener en el armario.
¿Y si unificamos moda con juguetes? Lo primero que nos viene a la mente es el famoso tanga o braguita vibradora. A día de hoy es uno de los complementos eróticos líderes en ventas, pero todavía hay quien no lo ha probado o ni tan siquiera sabe que existe…
Los tangas o braguitas vibradoras llevan en su parte frontal un pequeño bolsillito con cierre de velcro que guarda una discreta bala vibradora para la estimulación del clítoris, accionada remotamente con un mando a distancia.
¿Sugerencias de tangas o bragas vibradoras?
– El tanga vibrador control remoto Toy Joy Party In My Pants de color negro en estampado atigrado, sugerente y muy sexy, lleva incluida una estimulante bala que mide 6,5 cm. de largo.
– Tanga vibrador con estampado de cebra, sexy y atrevido, con una bala incluida de 7cm de largo x 2cm de ancho en su bolsillo oculto de velcro. Este tanga en concreto, no lleva mando y se activa directamente el vibrador.
– Braguitas vibradoras Fetish Fantasy Elite con masajeador clitoriano de silicona de alta calidad, que además incluye lubricante y antifaz erótico para darle más juego al momento.
Prueba una braguita o un tanga vibrador, disfrútalo y dame la razón en que no querrás despegarte de él…
Referencias de braguitas vibradoras en el cine:
Gracias a la película «La Cruda Realidad», estrenada hace unos tres años, con Katherine Heigl y Gerard Butler como protagonistas, este juguete erótico adquirió una elevada fama con la escena en la que Katherine está en una cena, pierde el mando de la braguita vibradora, con tan «mala suerte» de que un niño lo encuentra y se pone a jugar con los botones sin saber realmente para qué sirve ni lo que está haciendo. Katherine… se sube por las paredes del placer.
Comparte esta noticia: facebook twitterAutor: Bea Cárdenas