Una de las secciones masculinas del sex shop más variopintas, es la de los anillos peneales, unos anillos hechos para, mayormente, prolongar la erección en las relaciones sexuales. O más bien, esa fue su función primaria cuando se inventaron, pero a día de hoy existen varios tipos para cumplir con algunas otras funciones.
Su modo de utilización es muy sencillo: el anillo para el pene se coloca en la base del mismo, sujetando bien el escroto y los testículos. La función que el anillo cumple es la de prolongar la erección reteniendo la sangre en el pene, lo que incluso ayuda a retrasar la eyaculación.
A la hora de adquirir un anillo para el pene, es muy importante elegir el tamaño adecuado, pues si aprieta demasiado, el chico corre el peligro de que se le corte la circulación y se impida la erección. Del mismo modo, si el anillo queda flojo, no se percibirán los efectos para los cuales está fabricado.
Ante cualquier molestia o incomodidad, lo más aconsejable es retirarlo, quizás el problema sea que la talla del mismo no es la adecuada. Y en cualquier caso, no se recomienda utilizar el anillo para el pene más de media hora seguida.
En cuanto a tipos de anillos se trata, a día de hoy se pueden encontrar en el mercado de los juguetes eróticos diversos modelos. Para la satisfacción de ambas partes de la pareja, se utilizan mucho los anillos vibradores, que van con estimulante de clítoris incluido. Existen de todos los colores, tamaños, texturas, formas y materiales (silicona, látex…).
¡Sorprende a tu pareja con un anillo vibrador y descubrid sensaciones que jamás pensasteis que podríais sentir! Además, son muy económicos.