Fisting o introducir la mano en la vagina o el ano
Categoría: Sexualidad
Etiquetas: consoladores
Con la normalización de la pornografía y el fácil acceso que hoy en día tod@s tenemos a ella, en más de una ocasión hemos visto vídeos en los que a las chicas les introducen la mano en su vagina: El Fisting. Puede sonar fuerte, pero es una práctica cada vez más llevada a cabo por las parejas dado su elevado voltaje sexual. No hay que asustarse por ello, no es nada malo, sino todo lo contrario si lo hacemos bien.
¿Qué es el fisting? El fisting es una práctica sexual que consiste en introducir la mano en la vagina o ano. Si bien es cierto que lo más habitual y menos agresivo es la vagina. Este es un juego que se puede disfrutar perfectamente en pareja sin miedo a nada. También se puede disfrutar a solas, pero la libertad de movimiento se ve ligeramente reducida.
La idea del fisting femenino en la vagina es sentirse llena al sentir un puño cerrado centro. Que el puño roce las paredes estimulando plenamente cada nervio de la cavidad vaginal. Gracias al porno, estas prácticas son más habituales en las parejas de “a pie”, en la búsqueda de nuevas sensaciones y huida de la rutina coital.
Eso sí, para llevar a cabo esta práctica queremos daros unos consejillos para que el juego sea satisfactorio desde la primera vez y no os ocasione ningún daño que ya os cierre en banda para siempre en volver a probarlo (como suele pasar a algunas chicas con la primera relación anal fallida y ya no les apetece probar más).
1- Lo primero de todo, la mano debe estar impoluta y sin anillos y pulseras. Y para mayor seguridad, se aconseja utilizar un guante de látex que evite posibles infecciones.
2- Muy importante. Debemos partir de una lubricación total para que no se produzcan lesiones ni dolores innecesarios. Echa un vistazo a los mejores lubricantes en el sex shop Me Lo Paso Goma.
3- Se ha de realizar despacio y con calma, jugando poco a poco con los dedos y el lubricante. Os recomendamos echar un vistazo a nuestra amplia gama de lubricantes de gran calidad para evitar riesgos.
4- Y por supuesto, la confianza ha de ser fundamental entre ambos para realizar un fisting cómodo, relajado y placentero.
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Comparte esta noticia: facebook twitterAutor: Bea Cárdenas