26 Abr 11

Lubricación femenina

Categoría: Consejos

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Lubricación femenina

La primera respuesta sexual de la mujer cuando está excitada, es la lubricación genital, la lubricación de su vagina de forma cuasi instantánea.

La lubricación femenina es una respuesta fisiológicamente totalmente normal y natural en el cuerpo de la mujer. ¿Pero de dónde provienen los fluidos vaginales? El cuerpo de la mujer presenta unas glándulas situadas a ambos lados de la vagina, las denominadas glándulas Bartolino, que se encargan de la lubricación vaginal, lo cual facilita la penetración en las relaciones sexuales.

La lubricación femenina puede ser normal, escasa o abundante. Cuando hablamos de una lubricación escasa, hablamos de una dificultad a la hora de mantener relaciones, siendo éstas incómodas y dolorosas. En cambio, cuando hablamos de lubricaciones abundantes, hablamos de una pérdida de sensibilidad, tanto para el hombre como para la mujer. En el término medio está la virtud, por ello la conveniencia de utilizar lubricantes de venta en sexshop para la escasez de humedad vaginal, y la conveniencia de consultar al ginecólogo un exceso de lubricación. El exceso puede deberse, generalmente, a algún tipo de infección fácilmente tratable.

Aunque existe un gran mito en todo lo que gira en torno a la lubricación de la mujer, la lubricación vaginal. Equívocamente, en muchas ocasiones los hombres relacionan la lubricación genital de la mujer con excitación, y nada más lejos de la realidad. Esto tiende a llevar a resultados fracasados y no deseados en la pareja.

La densidad, cantidad y olor de la lubricación genital varían de una mujer a otra, y en una misma mujer dependiendo del momento del ciclo menstrual en el que se encuentre, de los juegos eróticos previos realizados, del estado de sus hormonas… Por lo que la cantidad de lubricación no tiene por qué indicar el grado de excitación de la mujer.

En estos casos, lo mejor es ponerse en manos de un especialista y que sea quien trate el caso clínico de primera mano, y en segundo lugar, dejar las cosas claras en pareja para que no haya lugar a equívocos. La información y el conocimiento es la madre de la ciencia y de la experiencia.

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